Durante 90 minutos intento absorber el ingente caudal informativo que tratan de transmitirme y de los muchos proyectos y anhelos que tienen. Su leitmotive, por encima de todo, es la felicidad de sus hijos y saben que una parte importante de ese objetivo deben cimentarlo en informar a la sociedad. May Martín, es la psicóloga, terapeuta y alma y motor de este paso al frente: "los padres, los familiares y los profesores son los primeros que tiene que aprender, conocer, concienciarse e implicarse en el mundo de los niños hiperactivos y/o desatentos. No son niños desordenados, vagos, desobedientes o maleducados, todo lo contrario, suelen ser en un 99,9 por ciento niños inteligentes por encima de la media, despiertos, líderes y extremadamente cariñosos. Sencillamente el problema es que no les funcionan correctamente dos neurotransmisores (dopamina y noradrenalina) y desbordan energía sin ser capaces de controlarla". Así, suele ser en el colegio donde se enciende esa luz que indica que algo no marcha bien. La imposibilidad de mantenerse quieto, la desatención, la desorganización o las dificultades de concentrarse o socializarse -rehuyen de los grupos- son signos evidentes que deben poner sobre aviso. Pese a que su origen es neurobiológico, genético y hederitario rechazan el vocablo enfermedad y se inclinan por el de síndrome.
Una detección precoz y un diagnóstico acertado resultan fundamentales e indispensables para que sus hijos puedan tener una mayor calidad de vida y un desarrollo como persona más o menos normal y la escasez de especialistas en la materia representa una rémora. "Aunque niños hiperactivos los ha habido toda la vida, en España se trabaja en esta disfunción desde hace sólo 12 años. Antes no se detectaba", afirma Martín. Ésta asegura que la medicación y la psicoterapia conductual deben ir asociadas y dilatarse durante años: "al principio es muy ingrato, pero granito a granito todo ese trabajo va dejando poso y a largo plazo surte efecto".
Pero tanto la farmacología como las sesiones son caras y la seguridad social apenas sufraga las medicinas u ofrece terapias al cabo del año. De ahí que el pasado 12 de noviembre constituyeran la asociación ATDAHTA. A través de ella pretenden aglutinar a los afectados, ayudar a los padres que descubren por primera vez el síndrome, reunirse, aprender más, realizar terapias, talleres, seminarios, concienciar a la sociedad, reivindicar tratamientos subvencionados, etc. Una sede propia es su siguiente objetivo y actualmente elaboran el proyecto que les ha requerido la Concejalía de Bienestar Social para ser asociación con pleno derecho.
De momento se relacionan por e-mail a través de la dirección de correo electrónico: atdahta@gmail.com, aunque ya está en marcha la elaboración de un Blog. También en estas reuniones casi 'clandestinas' y ansían la llegada del 18 de marzo, día en el cual se darán a conocer públicamente. Será en la biblioteca José Hierro a partir de las 19.30 horas.
Librada Díaz
“A mi hija la diagnosticaron con año y medio. Más de 15 minutos no puede estar en el parque, se alborota si hay muchos niños. En las reuniones familiares no se puede controlar. Trato de relajarla. Ahora tiene 4 años, demanda mucho cariño y busca nuestra aprobación en todo. En clase es desatenta. En Primaria será más complicado. El mayor problema es que la gente no lo entiende. Su médico me dijo que yo también fui hiperactiva.”.
Elena Alegría
“Con tres años, en 1º de infantil, me dijeron que le costaba estarse quieto en clase y en el comedor más. El psiquiatra le diagnosticó hiperactividad y déficit de atención. Yo no sabía qué hacer ni dónde ir, me superaba la situación. Lleva más de dos años medicado y tiene personal de apoyo en el colegio. Es muy impulsivo. Todavía no sabe leer. Con más niños se alborota. La vida social es complicada. Con medicación no basta”.
Mª Paz Lázaro
“Siendo pequeño crees que es normal que no pare, es un niño. Lo supe cuando tenía tres años. La medicación le va bastante bien. Lo peor fue en su anterior centro escolar y el desconocimiento del profesorado (aguanta las lágrimas), le encerraron en el cuarto de baño. Fue tremendo. En el nuevo estoy encantada. En el patio tiene problemas con las relaciones, pero el cambio ha sido abismal. Lo que buscas es que tu hijo sea feliz y estás dispuesta a todo”.
Beatriz Núñez
“Mi hijo tiene diez años y lo sé desde hace cuatro. Yo estaba perdida. Los padres necesitamos ayuda para saber cómo llevar a nuestros hijos. La asociación es un gran apoyo, pero necesitamos una sede. La seguridad social hace un seguimiento esporádico y necesitamos refuerzo. Cada terapia ronda los 50 euros y a eso hay que sumar 33 euros fijos al mes en fármacos. Necesitamos que esas medicinas lleven el punto negro y sean subvencionadas”.
María Alacuart
“Hay que huir de la negatividad y el no. Es mejor no premiar que castigar. Buscamos mejorar la calidad de vida y la felicidad de nuestros hijos. La conducta acaba modificándose. Mi hijo tiene ya diez años y la evolución ha sido notable. May es un encanto y nos ha ayudado mucho. Hacen falta más especialistas. Presentaremos el proyecto y solicitaremos subvenciones. En C-LM hay una asociación en Ciudad Real y otra en Toledo”.
Una detección precoz y un diagnóstico acertado resultan fundamentales e indispensables para que sus hijos puedan tener una mayor calidad de vida y un desarrollo como persona más o menos normal y la escasez de especialistas en la materia representa una rémora. "Aunque niños hiperactivos los ha habido toda la vida, en España se trabaja en esta disfunción desde hace sólo 12 años. Antes no se detectaba", afirma Martín. Ésta asegura que la medicación y la psicoterapia conductual deben ir asociadas y dilatarse durante años: "al principio es muy ingrato, pero granito a granito todo ese trabajo va dejando poso y a largo plazo surte efecto".
Pero tanto la farmacología como las sesiones son caras y la seguridad social apenas sufraga las medicinas u ofrece terapias al cabo del año. De ahí que el pasado 12 de noviembre constituyeran la asociación ATDAHTA. A través de ella pretenden aglutinar a los afectados, ayudar a los padres que descubren por primera vez el síndrome, reunirse, aprender más, realizar terapias, talleres, seminarios, concienciar a la sociedad, reivindicar tratamientos subvencionados, etc. Una sede propia es su siguiente objetivo y actualmente elaboran el proyecto que les ha requerido la Concejalía de Bienestar Social para ser asociación con pleno derecho.
De momento se relacionan por e-mail a través de la dirección de correo electrónico: atdahta@gmail.com, aunque ya está en marcha la elaboración de un Blog. También en estas reuniones casi 'clandestinas' y ansían la llegada del 18 de marzo, día en el cual se darán a conocer públicamente. Será en la biblioteca José Hierro a partir de las 19.30 horas.
Librada Díaz
“A mi hija la diagnosticaron con año y medio. Más de 15 minutos no puede estar en el parque, se alborota si hay muchos niños. En las reuniones familiares no se puede controlar. Trato de relajarla. Ahora tiene 4 años, demanda mucho cariño y busca nuestra aprobación en todo. En clase es desatenta. En Primaria será más complicado. El mayor problema es que la gente no lo entiende. Su médico me dijo que yo también fui hiperactiva.”.
Elena Alegría
“Con tres años, en 1º de infantil, me dijeron que le costaba estarse quieto en clase y en el comedor más. El psiquiatra le diagnosticó hiperactividad y déficit de atención. Yo no sabía qué hacer ni dónde ir, me superaba la situación. Lleva más de dos años medicado y tiene personal de apoyo en el colegio. Es muy impulsivo. Todavía no sabe leer. Con más niños se alborota. La vida social es complicada. Con medicación no basta”.
Mª Paz Lázaro
“Siendo pequeño crees que es normal que no pare, es un niño. Lo supe cuando tenía tres años. La medicación le va bastante bien. Lo peor fue en su anterior centro escolar y el desconocimiento del profesorado (aguanta las lágrimas), le encerraron en el cuarto de baño. Fue tremendo. En el nuevo estoy encantada. En el patio tiene problemas con las relaciones, pero el cambio ha sido abismal. Lo que buscas es que tu hijo sea feliz y estás dispuesta a todo”.
Beatriz Núñez
“Mi hijo tiene diez años y lo sé desde hace cuatro. Yo estaba perdida. Los padres necesitamos ayuda para saber cómo llevar a nuestros hijos. La asociación es un gran apoyo, pero necesitamos una sede. La seguridad social hace un seguimiento esporádico y necesitamos refuerzo. Cada terapia ronda los 50 euros y a eso hay que sumar 33 euros fijos al mes en fármacos. Necesitamos que esas medicinas lleven el punto negro y sean subvencionadas”.
María Alacuart
“Hay que huir de la negatividad y el no. Es mejor no premiar que castigar. Buscamos mejorar la calidad de vida y la felicidad de nuestros hijos. La conducta acaba modificándose. Mi hijo tiene ya diez años y la evolución ha sido notable. May es un encanto y nos ha ayudado mucho. Hacen falta más especialistas. Presentaremos el proyecto y solicitaremos subvenciones. En C-LM hay una asociación en Ciudad Real y otra en Toledo”.
Muy bien por todas las madres que apareceis en el artículo. Estamos en ello y todas unidas coneguiremos que todo por lo que luchamos,se haga realidad. Y que nuestros hijos e hijas tengan una mayor calidad de vida.
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